domingo, 20 de septiembre de 2009

Un día para escribir

Y yo sólo confiaba,
sólo confiaba en la luz del cielo,
en el canto de las aves,
en el sonido de los pasos,
en las risas lejanas,
en la mirada que no olvido,
en las palabras que iniciaron todo
y en la fuerza que me impulsa ahora
A dar pasos donde no veo camino,
a sonreir donde veo tristeza,
a gritar donde escucho silencio,
a brillar donde cae la oscuridad,
a estar donde encuentro soledad,
a amar donde siento inseguridad,
a creer donde nace el miedo,
a seguir donde a veces dudo pero...
mi fuerza, mis pasos, mi sonrisa, mis gritos,
mi luz, mi presencia, mi amor y mi fé
me dicen que aunque no sea fácil... es correcto.
Hoy...
Hoy se revelaron ante mis ojos muchas profecías que creí falsas,
Hoy la verdad se deslizo suave por mi camino, como un pétalo de rosa abandonado,
Hoy la luz de mis ojos brilló en otros ojos, con tanta luz,
y la sonrisa de mis labios, sonrió en otros labios, con tanta alegría,
Hoy mis sueños dormidos hicieron despertar los sueños de otros, con tanta energía.
Y me detuve en algun espacio de todos los que conosco
a contemplar el tiempo que he vivido
y en una tosca línea dibujada sobre la arena
reposaban todos mis recuerdos:
sangre, rosas,
sueños, lágrimas,
promesas, amistades,
amores, esperanzas, sonrisas y tanto...
Y no se cuanto más dibujará Díos esa línea
sobre el tiempo del universo: mi línea, ¡MI VIDA!.
Pero quiero seguir ahora,
por todas las veces que antes,
entre el miedo y la confusión
cerré los ojos y me negué a hacerlo... quiero.
Ahora...
Quiero llenar mi vida
de recuerdos de verdad, de alegría,
y de todo lo bueno que puedas darme, quiero aprender... quiero
lentamente y disfrutando, como jugando,
para entregar un día, una vida llena de todo esto... quiero.
Y decir alguna vez:
Más brillante que la luz del cielo, tú eres mi luz.
Más hermoso que el canto de las aves, tu voz es mi canto.
Más cercano que el sonido de aquellos pasos, tus pasos son mi camino.
Más alegre que las risas lejanas, tu risa es mi alegría más intensa.
Más eterna que aquella mirada, tu mirada llena de inquietud y esperanza.
Más cierta que las palabras que iniciaron todo, no... esas fueron tus mismas palabras.
Tus palabras tan llenas de verdad...
Y aunque sienta que aún falta algo también
es cierto que tengo bastante para confiar... tengo.
Tengo fé suficiente para abrazar tu corazón con toda la fuerza de mi alma... y
tengo miedo suficiente para desear un abrazo que me refugie con esa intensidad.
Te quiero y sé cuales son los límites de lo que siento.
Una vez más... te quiero.

1 comentarios:

Voces en la Obscuridad dijo...

Woow!!
que ermoso que pienses asi de tu vida,
me alegra ver que no eres de seso que
pinsa que todo es malo y negro.
Me alegro que quieras seguir viviendo
como si todos los dias fueran el ultimo
de ella.
Me alegro por ti y que seas feliz,
tambien me alegro que tu corzon
tenga a quien amar y que no este solo.
Bueno sigue asi y nunca cambies, y
suerte en tu vida.

Abrazos y Besos
Karina^-^

Publicar un comentario